Estaba enamorada de alguien que no conocía
Seguimos planeando la próxima vez que nos veremos.
Yo siempre he sido una niña que se enamora muy rápido
y esta vez no fue la excepción. Mi historia empezó un 26 de julio,
estaba en la casa de mi mejor amiga con mis dos mejores amigas y mi
amiga Majo tenía un amigo que siempre había sido muy lindo conmigo. Era
un niño muy lindo aunque no muy guapo pero tenía algo que siempre me
llamó la atención. Solo nos conocíamos por Facebook y nos habíamos visto
varias veces por videollamada ya que él vive en una ciudad a nueve
horas de la mía.
Ese día estaba Majo haciendo videollamada con él y yo estaba
ahí y empezamos a platicar. Cuando colgamos me metí a Twitter y él había
puesto un tweet que decía ” Wow que bonita
está!”. Obviamente pensé que era para mí porque ya me habían dicho que
yo le llamaba la atención antes. Se lo enseñé a mi amiga y ella le
pregunto a quién se refería y el respondió “Para la guerita❤️”. Yo me
emocioné porque él también me llamaba la atención y no dudé en enviarle
un mensaje. Le dije que me habían dicho que tenía algo que decirme y él
se negaba hasta después de mucho insistir me dijo que yo le llamaba
bastante la atención. Esa noche nos desvelamos hablando y tratando de
conocernos más.
Así fueron pasando los días y los meses, hacíamos FaceTime todos los días y durábamos horas platicando. Era un niño bastante gracioso y era muy lindo conmigo. Cada vez sentía que lo quería más y yo sabía que eso era malo ya que nunca nos habíamos visto en persona y él vivía a nueve horas de mí. Todos los días fantaseábamos con cómo sería la primera vez que nos veríamos aunque sinceramente lo veíamos muy lejano.
Pasaron varios problemas entre nosotros y nos cortábamos el rollo pero no podíamos dejar de hablarnos y siempre volvíamos. Él siempre ha sido alguien muy especial para mí ya que le confío todo y él a mí. A los cuatro meses me di cuenta de algo. Realmente estaba enamorada de alguien que no conocía.
Yo nunca le había dicho te amo porque creo que es una palabra muy fuerte y con mucho poder pero una vez hablando por teléfono se lo dije de todo corazón. Un lindo y tímido Te amo salió de mis labios y él se quedó pasmado porque sabía lo fuerte que pensaba que era esa palabra pero había un sentimiento que nunca había sentido por nadie. Yo nunca había tenido novio ni había dado mi primer beso así que cada vez más fantaseaba más con nuestro encuentro.
Llegó mi cumpleaños número 14 (él acababa de cumplir 15) y yo estaba en una quinceañera y me habló borracho regañándome e insultándome. Yo me enojé mucho por cómo me habló y porque no me gustaba que tomara y una vez más le dije que lo dejáramos ahí. Como siempre a la semana volvimos pero él se seguía poniéndose borracho y eso a mí no me gustaba para nada.
Un día antes de cumplir seis meses de andar quedando le pusimos fin a lo que teníamos porque sentíamos que las cosas iban muy mal aunque seguíamos hablando como amigos. Seis días después de eso me dijo que él iría a un pueblo que está cerca del lugar donde vivo, y sorpresiva e inesperadamente Majo me dijo que ella también iría es fin de semana y me invitó.
Me emocioné demasiado porque al fin estaríamos juntos. Yo estaba en la casa de la prima de Majo y sonó mi celular a las 12 de la noche, ya estábamos acostadas. Solo me dijo “Ey, sal estoy afuera”. Me emocioné demasiado pero no podía salir porque la tía de Majo se enojaría y nos regañaría así que abrí una ventana del primer piso y estaba quebrada y pude abrazarlo. No lo podía creer. Había abrazado al niño que me gustaba hace seis meses y que nunca había visto. Sentí un olor raro y sí, definitivamente, estaba borracho.
Me enojé y le cerré el otro pedazo de la ventana y me subí al cuarto. Me marcó de nuevo y le dije que no saldría así que abrí el balcón y él subió todo el volumen al carro y puso una canción muy linda y me estaba gritando que me amaba y que por eso me llevaba serenata. Yo me sentía como Rapunzel en el balcón con muchas estrellas y con el niño que me gustaba llevándome serenata. Fue muy lindo excepto porque andaba borracho y en eso escuchamos pasos por las escaleras y cerramos el balcón y él se fue rápido en el carro. Todavía no podía creer lo que había pasado hace algunos minutos. Me quedé dormida.
Al día siguiente andábamos dando la vuelta y llegamos a la casa como a las cuatro de la tarde y me marcó y me dijo que iría a las cuatro y media. Me alisté y me veía muy bonita según me dijeron todas. Lo esperé y se llegaron las 5:30 y no llegaba. Me quedé dormida y me despertó Majo a las 6:30 y me dijo que saliéramos. Salimos y lo primero que vi fue a él. Lo tenía frente a mí y finalmente sobrio. Corrí y lo abracé muy fuerte. Fue un sentimiento indescriptible. Nos sentamos y platicamos de todo.
A las 8:30 nos dijeron que pasáramos a la sala. Me senté en el sillón más pequeño intencionalmente y se sentó conmigo. Nunca olvidaré la manera en la que agarraba mis manos y jugaba con mi cabello. Sentía que era un sueño y no quería que terminara. De repente me tapó los ojos con mi cabello y sentí que se acercó. Finalmente había pasado, mi primer beso y con el niño que tanto quería. Sólo sonreí y me aparté lentamente. Siguió jugando con mi cabello, agarrándome las manos y tomándonos fotos y me seguía dando besos.
Llegó la hora que no quería y se tenía que ir. Salimos y me abrazó muy fuertemente por un largo rato y me besaba. Finalmente tuvo que irse y en la mañana siguiente tenía que regresar a donde vivía. Nos despedimos y esa fue la última vez que lo vi. Aun seguimos hablando y planeando la próxima vez que nos veremos ya que nos dimos cuenta que estábamos realmente enamorados.
Así fueron pasando los días y los meses, hacíamos FaceTime todos los días y durábamos horas platicando. Era un niño bastante gracioso y era muy lindo conmigo. Cada vez sentía que lo quería más y yo sabía que eso era malo ya que nunca nos habíamos visto en persona y él vivía a nueve horas de mí. Todos los días fantaseábamos con cómo sería la primera vez que nos veríamos aunque sinceramente lo veíamos muy lejano.
Pasaron varios problemas entre nosotros y nos cortábamos el rollo pero no podíamos dejar de hablarnos y siempre volvíamos. Él siempre ha sido alguien muy especial para mí ya que le confío todo y él a mí. A los cuatro meses me di cuenta de algo. Realmente estaba enamorada de alguien que no conocía.
Yo nunca le había dicho te amo porque creo que es una palabra muy fuerte y con mucho poder pero una vez hablando por teléfono se lo dije de todo corazón. Un lindo y tímido Te amo salió de mis labios y él se quedó pasmado porque sabía lo fuerte que pensaba que era esa palabra pero había un sentimiento que nunca había sentido por nadie. Yo nunca había tenido novio ni había dado mi primer beso así que cada vez más fantaseaba más con nuestro encuentro.
Llegó mi cumpleaños número 14 (él acababa de cumplir 15) y yo estaba en una quinceañera y me habló borracho regañándome e insultándome. Yo me enojé mucho por cómo me habló y porque no me gustaba que tomara y una vez más le dije que lo dejáramos ahí. Como siempre a la semana volvimos pero él se seguía poniéndose borracho y eso a mí no me gustaba para nada.
Un día antes de cumplir seis meses de andar quedando le pusimos fin a lo que teníamos porque sentíamos que las cosas iban muy mal aunque seguíamos hablando como amigos. Seis días después de eso me dijo que él iría a un pueblo que está cerca del lugar donde vivo, y sorpresiva e inesperadamente Majo me dijo que ella también iría es fin de semana y me invitó.
Me emocioné demasiado porque al fin estaríamos juntos. Yo estaba en la casa de la prima de Majo y sonó mi celular a las 12 de la noche, ya estábamos acostadas. Solo me dijo “Ey, sal estoy afuera”. Me emocioné demasiado pero no podía salir porque la tía de Majo se enojaría y nos regañaría así que abrí una ventana del primer piso y estaba quebrada y pude abrazarlo. No lo podía creer. Había abrazado al niño que me gustaba hace seis meses y que nunca había visto. Sentí un olor raro y sí, definitivamente, estaba borracho.
Me enojé y le cerré el otro pedazo de la ventana y me subí al cuarto. Me marcó de nuevo y le dije que no saldría así que abrí el balcón y él subió todo el volumen al carro y puso una canción muy linda y me estaba gritando que me amaba y que por eso me llevaba serenata. Yo me sentía como Rapunzel en el balcón con muchas estrellas y con el niño que me gustaba llevándome serenata. Fue muy lindo excepto porque andaba borracho y en eso escuchamos pasos por las escaleras y cerramos el balcón y él se fue rápido en el carro. Todavía no podía creer lo que había pasado hace algunos minutos. Me quedé dormida.
Al día siguiente andábamos dando la vuelta y llegamos a la casa como a las cuatro de la tarde y me marcó y me dijo que iría a las cuatro y media. Me alisté y me veía muy bonita según me dijeron todas. Lo esperé y se llegaron las 5:30 y no llegaba. Me quedé dormida y me despertó Majo a las 6:30 y me dijo que saliéramos. Salimos y lo primero que vi fue a él. Lo tenía frente a mí y finalmente sobrio. Corrí y lo abracé muy fuerte. Fue un sentimiento indescriptible. Nos sentamos y platicamos de todo.
A las 8:30 nos dijeron que pasáramos a la sala. Me senté en el sillón más pequeño intencionalmente y se sentó conmigo. Nunca olvidaré la manera en la que agarraba mis manos y jugaba con mi cabello. Sentía que era un sueño y no quería que terminara. De repente me tapó los ojos con mi cabello y sentí que se acercó. Finalmente había pasado, mi primer beso y con el niño que tanto quería. Sólo sonreí y me aparté lentamente. Siguió jugando con mi cabello, agarrándome las manos y tomándonos fotos y me seguía dando besos.
Llegó la hora que no quería y se tenía que ir. Salimos y me abrazó muy fuertemente por un largo rato y me besaba. Finalmente tuvo que irse y en la mañana siguiente tenía que regresar a donde vivía. Nos despedimos y esa fue la última vez que lo vi. Aun seguimos hablando y planeando la próxima vez que nos veremos ya que nos dimos cuenta que estábamos realmente enamorados.